El principal problema que aborda este proyecto es la alta vulnerabilidad de las personas que viven en las zonas ribereñas de las dos cuencas priorizadas, cuyas áreas están demarcadas como zonas de alto riesgo en cuanto a fenómenos hidrometeorológicos. Existen varios escenarios de riesgo, tales como, la crecida de los ríos (en las cuencas bajas y/o medias), los deslizamientos de tierra causados por las lluvias, o incluso, el colapso de las presas debido a los terremotos, lo que podría causar una presa sin precedentes, enterrando comunidades enteras. El diagnóstico identifica los grupos de población más vulnerables.